¿Es este efecto de atrapar la bala con la boca un truco asesino?
La Bala Atrapada: el truco de magia asesino
La Bala Atrapada o La Bala en la Boca, según como se lo llame, es uno de los trucos de magia más peligrosos que un mago pueda realizar y, como si fuera poco, se ha venido repitiendo sistemáticamente en la historia de la magia desde tiempos inmemoriales. Muchos mitos y leyendas rodean al efecto, alegando, incluso, que hasta la fecha más de doce ilusionistas han muerto realizando la prueba.
¿Por qué tiene tanto éxito?
Sin embargo, y como ya adelanté, su arrollador éxito viene acompañado de la triste historia de ser la ilusión que mas vidas se ha cobrado en el ambiente; lamentablemente, no son pocos los magos que literalmente han dejado de existir sobre el escenario durante la ejecución de este efecto; la mayoría de las veces, frente a la mirada de decenas de espectadores. Muchos tantos otros ilusionistas han resultado heridos, aunque lograron sobrevivir. Pese a un riesgo por demás comprobado, hasta el día de hoy hay magos que astutamente deciden incluirlo en sus repertorios.
Primeros registros de «La Bala Atrapada»:
Una de las primeras documentaciones de La Bala Atrapada apareció en el libro Threats of God’s Judgments escrito por el reverendo Thomas Beard en 1631. Cincuenta años antes, en Francia, un mago con el nombre de Coullew of Lorraine había estado ya realizando la captura de una bala, demostrando que podía atraparlas con las manos. (Este primer ilusionista en 1613 fue golpeado hasta la muerte, con su propia pistola por un asistente enfadado.) A lo largo del 1700, fueron desarrolladas algunas variaciones de este efecto por una serie de artistas callejeros.
Alrededor de 1840, el mago escocés John Henry Anderson (foto) empezó a ejecutar este truco en los teatros por toda Gran Bretaña. Anderson, o El Gran Mago del Norte como fue llamado, actuó para personajes como PT Barnum, el Zar Nicolás, la Reina Victoria, y el príncipe Albert of Saxe-Coburg and Gotha, además de realizar giras en los Estados Unidos y Australia, con lo que La Bala Atrapada tuvo mucha difusión. Al menos cuatro rivales de Anderson, adaptado e imitaron su truco en sus propias actuaciones.
Un pasado trágico:
Thomas Frost, en 1876, en su libro The Lives of the Conjurors describió a dos artistas de la década de 1820 llamados Torrini De Grisy y DeLinsky, quienes fueran responsables de la muerte de su hijo y esposa, respectivamente. En 1869, un ilusionista con el nombre de Dr. Epstein fue asesinado cuando la punta de la vara utilizada para empujar la carga en el arma se rompió en el interior y posteriormente fuera lanzada hacia en el disparo.
Chung-ling-soo Chung
Fue un exitoso mago que vivió a principios del siglo XX y el cual podría decirse que llegó a ser el “David Copperfield” de la época. Se caracterizaba por realizar su Magia bajo un misterioso estilo chino copiado de su rival directo: Ching Ling Foo. Pero a diferencia de este último, Soo no era realmente chino, simplemente personificaba el papel de un mago oriental para causar sensación. Increíblemente lo hacía hasta tal punto, que en vida nadie nunca sospechó su verdadera identidad: la de un mago americano nacido en Brooklyn.
La Bala Atrapada fue justamente uno de los efectos que, junto con su estilo oriental, lo ayudaron a alcanzar su fama en Londres y en el mundo; realizaba la hazaña bajo el título “The Living Target”. En el final, escupía las balas sobre un plato, para que se pudiera corroborar que realmente eran las que el público había firmado.
Sin embargo, el destino le tenía preparado un trágico final: la noche del 23 de marzo de 1918, en una actuación en el teatro Wood Green Empire de Londres, Chung Ling Soo fue impactado en el estómago de manera accidental, y llegó a decir algo como “Dios mio, me han disparado. Baja el telón”, la cortina se cerró rápidamente mientras lo trasladaban al hospital más cercano, en el cual murió poco tiempo después.
Alrededor de su muerte se plantearon varias interrogantes. No se sabe a ciencia cierta si realmente ocurrió un accidente, un suicidio o un asesinato de su círculo íntimo. Una de las teorías reside en que su representante estaba enamorado de su esposa, por lo que este planeó todo, siendo además quien ejecutaba los disparos en todas las presentaciones. Otra hipótesis dice que a su muerte la planeó su esposa, como producto de los celos al estar al tanto de que Chung tenía una amante y, además, una segunda familia (sobre esto último, aparentemente en ese entonces ya estaba separado). Pese a las hipótesis, la investigación policial realizada en aquellos tiempos dictaminó que había ocurrido un accidente.
Ese suceso, la muerte de Chung, sería la causante de que durante algunos años la prueba perdiera cierta popularidad entre la gente, aunque nunca llegaría a desaparecer por completo. Sin embargo, con el tiempo, Chung Ling Soo sería recordado como uno de los magos referentes de la ilusión de atrapar la bala y sus mortales riesgos. Hablar del desafío de La Bala Atrapada es sinónimo de hablar de Chung Ling Soo.
Ya mas adelantado en el tiempo, en la década de 1950, el mago australiano Maurice Rooklyn, sobrevió luego de ser impactado en el hombro por una bala. Después de este evento, por su seguridad, comenzó a llevar un chaleco antibalas bajo su camisa. Cuando más tarde otra bala lo golpeó en la cabeza, decidió quitar por completo el truco de su repertorio.
Esta es la lista de magos que hasta la fecha han perdido la vida:
1.Coulen (1500) – Golpeado hasta la muerte con la pistola de su truco.
2.Kia Khruse Khan (1818) – Mago indio, el informe de su muerte en el escenario pudo haber sido falsa.
3.Madame deLinsky (1820) – La asistente del mago murió cuando una bala fue cargada en la cámara por error.
4.Giovanni deGrisy – Hijo de Torrini, supuestamente mentor de Robert-Houdin, podría ser una historia ficticia; Torrini presuntamente disparó el arma que mató a su hijo
5.Arnold Buck (184) – Murió cuando un voluntario en secreto le añidió clavos a la pistola antes de que sea disparada contra el.
6.Adam Epstein (1869) – La vara utilizada para empujar la carga dentro del cañón del fusil, murió cuando el arma se disparó y esos pedazos lo impactaron.
7.Raoul Curran (1880) – Asesinado por un miembro de la audiencia que saltó de su asiento y le disparó sin previo aviso.
8.Deline Jr (1890) – Su padre, también mago, le disparó en escena.
9.Michael Hatal (1899) – Fracasó en el cambio de las balas auténticas por las falsas.
10.Otto Blumenfeld (1906) – Tampoco tuvo éxito en el cambio de las balas.
11.Chung Ling Soo (1918) – Muerto también en pleno escenario, aparentemente por un arma defectuosa.
12.T. H. Sartell – Tampoco logró cambiar las balas.
13.The Black Wizard of the West” (1922) – Su esposa le disparó a propósito balas reales.
14.Ralf Bialla (1972) – Se cayó de un acantilado, debido a constantes mareos de las lesiones causadas por el truco en cuestión.